Un masaje hecho con consciencia y empatía es como un mini viaje interior donde uno se permite reconectar consigo mismo. Lleva a un estado meditativo tanto al recibidor como al masajista.
En mis sesiones mezclo deep tissue, técnicas orientales, masaje thai y craneo sacral. Desde que me formé como quiromasajista en la escuela Sagrada familia 10 años atrás, estuve trabajando y estudiando constantemente en Barcelona. Cuando puedo viajo a Chiang Mai en Tailandia a seguir formándome en el arte del masaje tailandés. Ahora comparto mi tiempo entre el Mandarin Oriental Barcelona y los Rolling Therapists.
Mi practica de yoga es el mejor regalo que recibí de la vida, me permite lograr más presencia e intuición en mi trabajo. Creo que masaje Y YOGA van juntos ya que la parte física de su práctica es una forma de automasaje. Buscamos desbloquear y crear espacio en el cuerpo y la mente.